La Dirección Provincial de Vialidad (DPV) informó que logró poner en marcha 50 máquinas que fueron encontradas “abandonadas” en distintas dependencias. “Nuevamente serán destinadas al servicio público sin generar gasto alguno”, se indicó. La nueva conducción había denunciado el estado en que encontró el organismo.

“Se trata de 50 máquinas y herramientas que estaban abandonadas y fueron rescatadas por la actual gestión para volver a prestar servicios”, se informó desde la DPV.

El titular de la DPV, Exequiel Donda, había denunciado al asumir en diciembre que había encontrado “un verdadero cementerio” de maquinarias en estado de abandono. En su momento, también refirió un panorama de desorden administrativo, deudas e irregularidades en distintas áreas, entre ellas licitaciones sin presupuesto.

El subadministrador del organismo, Alfredo Bel, dijo por su parte: “El estado encontrado en Vialidad Provincial ha sido de caos total: de todas las rutas provinciales –salvo tres o cuatro- ninguna está en condiciones normales y los caminos rurales son todos un desastre. Hoy tenemos un presupuesto extremadamente acotado. Pedimos la emergencia vial cuando se hizo la ley de emergencia en obras públicas y no nos la dieron, pero la realidad hoy es que estamos en una situación de emergencia vial”.

“No tenemos caminos rurales que funcionen y las rutas de jurisdicción provincial están detonadas. Hoy estamos tapando los pozos con ripio y broza que consiguen los jefes zonales en la medida en que recibimos colaboración de los municipios, las comunas y hasta particulares que nos ayudan”, acotó.

“Hay problemas por las decisiones que se adoptaron en la administración anterior. Tenemos todas las alcantarillas detonadas, todos los pasos detonados, todos los caminos rurales detonados. No hay una máquina para pintar líneas amarillas hoy: no tenemos ni siquiera una pequeña máquina para salir a pintar líneas amarillas en las rutas”, graficó.

Bel: “Hoy estamos en una situación de emergencia vial pero no hay recursos”