-La Ley. Hay circunstancias que inmovilizan y apichonan. A veces las reacciones y los reflejos se demoran, no necesariamente por miedo, sino por el azoramiento. Cuando se procuran objetivos políticos generalmente se evalúan los obstáculos que habrá que sortear para conseguirlos. También las diferentes formas de resistencia que puede despertar la obtención de los mismos cuando conlleva desalojar a otros de esas posiciones conquistadas. Pero cuando las reacciones sobrepasan largamente las previsiones, suele generarse un estado de estupor que impide una pronta reacción. Sucedió muchas veces con el gobernador Sergio Montiel, por ejemplo cuando decretó 101 días de receso administrativo que enfriaron el clima caliente generado por el despido de casi 4.000 estatales. Luego sobrevinieron otras tantas que superaron el asombro inicial. La reacción oficial en relación con la pérdida de control en el IOSPER demuestra que, en cuanto a prepotencia se trata, Jorge Busti no va a ser menos que el autoritario caudillo radical. Vale repasar que cuando el senador provincial Héctor Strassera (PJ-Concordia) empezó a zarandear un proyecto de ley más o menos en los mismos términos de la que se termina de aprobar, la reacción de los trabajadores estatales a través de la mayoría de sus representaciones gremiales fue contundente. Frente a esta resistencia gremial el gobierno convocó a una consulta con el objetivo de desacreditar la representatividad gremial. Para demostrar el bajo poder de convocatoria de los gremios fue fijada para el 6 de febrero, justo cuando más del 60 por ciento de los empleados públicos se encuentra de vacaciones. El gobierno y sus diputados-sindicalistas aliados, José Allende y Juan Carlos Almada, sufrieron una fuerte derrota pues a pesar del receso la concurrencia a la consulta fue importante y los resultados no dejaron dudas sobre el rechazo a la propuesta oficial. Con los resultados incontrastables de la consulta en la mano al gobierno no le quedó otro camino que convocar a elecciones para normalizar el instituto. Sin embargo, nunca terminaron de digerir el trago amargo de esa derrota. Cuatro veces modificaron la fecha de elección dando lugar a que José Allende acomodara sus posiciones. El legislador oficialista y titular de UPCN es sindicado -incluso por altísimas figuras del gobierno- como el “dueño” de los negocios del IOSPER, y había quedado muy desacomodado luego de la derrota en la consulta.
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-Consecuencias. Un gran relator de boxeo, Víctor Torri, sabía utilizar el siguiente latiguillo: “Flamea como una bandera la humanidad de fulano”. Con esta expresión describía la situación en que un boxeador recibía un golpe de nocaut y demoraba en caer definitivamente a la lona. El cuerpo de Silvio Moreyra, al decir de Torri, flameaba frente a las cámaras el día después de que Diputados convertía en ley el proyecto de cogobierno. Luego de que Busti lo recibiera en su despacho tampoco daba muestras de haberse repuesto del golpe recibido. Su desconcierto no era personal, el conjunto del ambiente conformado por la Lista Unidad y sus aliados no lograba reaccionar frente a lo que consideraba un robo escandaloso. La sesión en la madrugada del jueves 15 había sido abrumadora y agobiante. Tanto el diputado solanista Nano Bescos como el propio presidente del bloque justicialista, Emilio Castrillón (La Paz), habían dado muestras de tener conciencia del arrebato institucional que se estaba motorizando. Ambos legisladores empujaron algún trecho en procura de establecer modificaciones al proyecto original de manera que volviera al Senado dando tiempo a algún tipo de negociación. Pero todo se desvaneció rápidamente. José Allende tenía la llave del texto de la ley y no habilitaba ningún tipo de negociación. Antes, en horas tempranas y al mejor estilo Montiel, había hecho ingresar subrepticiamente al recinto de Diputados a un importante número de jóvenes que portaban palos y contenían su euforia en virtud a las órdenes y promesas de pago recibidas de dirigentes de UPCN. Así, cuando se abrió la sesión las gradas habilitadas al público aparecieron ocupadas por estas personas que en su mayoría son reconocidas por integrar bandas juveniles de barrios marginales de Paraná.
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-Urdimbres. Es difícil imaginar algún tipo de proyección pacífica o racional en la vida del IOSPER a partir del escenario determinado por ley. Lo que surge a primera vista permite pensar que la gestión quedará trabada por el antagonismo que existe entre el proyecto oficial, fuertemente sospechado de corrupto e inflexiblemente alineado con los intereses de las corporaciones de la salud, y la Lista Unidad intentando revertir el vaciamiento de la principal obra social de la provincia. En la visión más general de la sociedad queda tocado el comportamiento del gobierno de Jorge Busti. Una vez más queda claro que por fuera de fintas y amagues progresistas siempre termina cerrando con el costado más salvaje de su entorno. Es que tal como se deja trascender no sólo en pasillos sino también en importantes despachos de la Casa de Gobierno, el IOSPER es un territorio alambrado para los negocios privados del poder y Allende sería su mayúsculo beneficiado. Los trascendidos son de larga data, el tiempo lo viene confirmando en forma categórica. Todo esto sucede en momentos en que el intendente de Santa Elena y ex vicegobernador de Busti, Domingo Daniel Rossi (PJ), es condenado por enriquecimiento ilícito. Un tribunal lo halló culpable y lo condenó a tres años de prisión en suspenso, más multas e inhabilitaciones. El tema fue ampliamente debatido en los círculos de la política provincial y hubo pronunciamientos para todos los gustos. La gravedad no finca sólo en que un funcionario tan importante sea condenado por estas prácticas. También se debe apuntar a que en el pulso de la opinión pública existe el convencimiento de que Rossi es sólo una parte, más chica que grande, de una maquinaria política que funciona en base a utilizar los recursos públicos en pos de intereses personales. Hay algo más que intuición en que estos métodos no empiezan ni terminan en Dani Rossi. Tampoco que sea privativa del Partido Justicialista. El segundo gobierno de Busti terminó especialmente envuelto en una atmósfera de sospechas, tanto es así que en ese desasosiego los entrerrianos inclinaron sus expectativas hacia el radicalismo en la idea de que Sergio Montiel era autoritario pero honrado.
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-La condena. Esto sucede en el plano más alto de la sociedad, pues la gestión política es la que en definitiva fija los lineamientos generales por donde transcurre el hacer cotidiano. Y cuando estos comportamientos viciosos se enquistan en planos tan elevados, reducirlos o extirparlos no resulta tarea sencilla. No obstante es importante valorar que las grandes construcciones entre otras cosas, son una larga sumatoria de ladrillos. La defensa del ex vicegobernador Rossi, ejercida por el abogado del foro paranaense Julio Federik, consistió en intentar legitimar el enriquecimiento indebido como forma de financiamiento de la tarea política. En otras palabras, para Federik, “Dani querido” no se enriqueció personalmente con el manejo indebido de los fondos públicos, pues esos recursos fueron volcados hacia la actividad política del intendente de Santa Elena y de los candidatos que compartían la línea interna con él.
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-Suicidios. La crónica registra que el día viernes a primeras horas de la tarde un padre encontró a su hijo pendiendo de una soga. Se había quitado la vida. Una vida joven, 27 años, con una militancia social que lo había hecho un muchacho querible entre quienes lo conocieron. Ni siquiera la algarabía colectiva de la goleada a Serbia y Montenegro lo pudo alejar de la determinación trágica. Y se trae la atención sobre el triunfo de la Selección porque fue evidente que ese día la infinita mayoría se sintió gozosa y llena de alegría. Sin embargo ahí había alguien, un joven, que en esos momentos se sintió más solo que nunca en su angustia. Cuántos suicidios van en Entre Ríos; cuántos jóvenes se van quitando la vida. El capitalismo que se vive despierta expectativas, deseos, pulsiones, que luego niega y reprime. Frustraciones, impotencias y dolores se propagan dentro de una caja sellada por la indiferencia y la frivolidad. Es momento de dar cuenta de los agujeros que se tiene.
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