Florencia Penna
El próximo jueves, a las 20, en el nuevo salón de la Bolsa de Cereales (San Martín 553), se presentará El pasado que aún no es historia, flamante libro de la historiadora Amelia Galetti y del periodista Roberto Trevesse, editado recientemente por Dunken. A lo largo de 140 páginas, los autores proponen 10 diálogos de historia inmediata mantenidos en el marco de la columna Pasado y Presente. Durante más de dos años, este micro tuvo espacio todos los jueves en el programa Cuenta Conmigo, que se transmite de lunes a viernes de 12 a 14 por FM Ciudad. ANALISIS los entrevistó a raíz de este destacado aporte al pensamiento y a la construcción de la sociedad, desde la elaboración crítica del sentido de historicidad.
“Las reflexiones sobre el pasado nos tienen que orientar hacia una mirada más profunda del mundo, de la realidad y de la vida, pero al mismo tiempo, nuestra propia vivencia y la conciencia que de ella tenemos, puede llegar a ser un inquietante lugar para la comprensión del pasado”. Así claman las palabras que ilustran la portada de El pasado que aún no es historia, libro de la historiadora Amelia Galetti y del periodista Roberto Trevesse que será presentado el jueves 24 con entrada libre y gratuita. El sobrio hall de entrada de la Bolsa de Cereales será la antesala ideal para degustar algún convite antes de ingresar al auditorio. Allí, dos personas allegadas a los autores realizarán las presentaciones de rigor: el doctor Jorge Daneri y la profesora Norma Mena de Vesco. “Ambos con gran trayectoria, además de ser muy buenos profesionales y personas, son afecto”, dijo Galetti. La velada será amenizada también por Luis Barbiero y su flauta traversa. “Contamos con todos ellos porque presentar un libro es compartirlo con amigos”, concluyó la profesora de Historia y de Lengua y Literatura Italiana, a quien el diario Clarín le encargó hace dos años que sintetizara los cinco siglos de la Historia Entrerriana para la colección Atlas Argentino, cuyo tomo correspondiente saldrá en octubre.
El ensayo dialogado entre la mirada del periodista y la estudiosa del pasado, fue prologado por Carlos Barros, doctor en Historia y catedrático de la Universidad de Santiago de Compostela (España), coordinador del Foro Internacional de Historia a Debate. Fue corregido por Graciela Dobantón e impreso por la Editoral Dunken de Buenos Aires, en 550 ejemplares. Ya se consigue en las librerías de Paraná a un valor de 30 pesos.
–¿Cómo surgió el proyecto de este libro?
Roberto Trevesse: –Estábamos en la radio un día y le pregunté si de todos esos micros que hicimos, y que yo sigilosamente grababa, no podría salir un libro. El tema era que había que desgrabar a texto. Lo hizo Andrea Fita, que aceptó el desafío, y cuando tuvimos el material Amelia dijo que sí, pero había que elegir los temas. Fue una selección muy minuciosa porque no podíamos hacer un libro de 500 páginas. La idea salió de ese micro donde hablábamos del pasado reciente, con ejemplos en los que nos íbamos a los siglos XVII, XVIII, XIX.
–¿Ha sido una columna destacada dentro del programa Cuenta Conmigo?
RT: –El programa ya tiene cinco años y en algún momento tuvo varias columnitas, pero como a mí me gusta la historia tenía particular interés, afecto e inquietud en tener la de Pasado y Presente. No es fácil para un periodista meterse en la historia ni para una historiadora intentar enhebrar todo un trabajo de información, de ilustración, de abrir las mentes, de hacer pensar desde la historia al periodismo radiofónico.
–¿Con qué expectativas recibiste la propuesta?
Amelia Galetti: –Creí en el proyecto y en la propuesta, tuve muchas expectativas porque hay un territorio de la Historia llamado Historia del Tiempo Presente o Historia Inmediata, que estudia el pasado reciente. Es importante vincular el hoy con la perspectiva de tiempo, sin dimensionar cronológicamente siglos, y hablar de temas que tienen que ver con la actualidad y su relación con el pasado. Estos micros tienen otro aspecto central que es poder llegar a la sociedad en general, sobre todo cuando ésta tiene picos en los cuales siente necesidad de acudir a explicaciones en el pasado. Y utilizando esta inclinación, donde la historia a veces está de moda, es que tuvimos la certeza que podía ser un espacio interesante.
–¿La relación clave que trabajan es la de pasado-presente?
RT: –Coincidimos en que el pasado aún no es historia, al menos en la Argentina. Pero nos referimos en general, abarcamos Latinoamérica y algunos otros conceptos que vienen de la vieja Europa y que llegaron a nuestro país. Creemos que está todo vigente: las divisiones, las luchas, los cuadillos, la historia de los de abajo, los personalismos, el populismo.
AG: –Tienen vigencia muchas prácticas políticas que pueden explicarse en el tiempo. Cuando hablamos de ciertas digitaciones políticas partidarias, de ciertas hegemonías de partidos políticos, de cierta neutralización de oposiciones, imperialismos, personalismos como cuando decimos política K o kirchnerismo. La historia de América Latina tiene en su aspecto de cultura política esa tendencia. Y hacemos esta relación donde vemos a través de la continuidad de dos siglos de historia latinoamericana y argentina, cómo esas prácticas y usos en la política siguen teniendo vigencia. Bajo el sistema democrático-republicano hay prácticas que son deformaciones.
–¿Desde qué mirada abarcan estas palabras claves?
RT: –Va de suyo que no estamos de acuerdo con todos los ismos. Tenemos otros pensamientos. Es una mirada crítica. Hubo que analizar todo lo que veníamos hablando en los micros, tema por tema. A medida que fuimos avanzando con los diálogos, nos dimos cuenta que se iban hilvanando unos tras otros, pues hablamos del pasado, del presente, de la historia, de la memoria, de la identidad, de la vocación imperial.
AG: –De la Historia Argentina a través de los manifiestos.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
