-Rojo y Negro. Exactamente el 25 de febrero se realizaron las elecciones complementarias en la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER), principal gremio docente de la provincia. La Lista Rojo y Negro, que proponía a César Baudino como secretario general, se alzó con la victoria. En Concordia, uno de los lugares que se volvía a votar, la lista de Baudino hizo una diferencia de 800 votos y se alzó con la mayoría y la minoría. En la provincia fueron en valores redondos, 400 los votos que marcaron la diferencia con la Lista Integración, que encabezaba Mario Bernasconi, de Concepción del Uruguay. Este proceso electoral que se termina cerrando en febrero impone el análisis por diferentes razones. Por lejos, AGMER es el agrupamiento docente de mayor importancia, tanto por la cantidad de afiliados como por el protagonismo que supo ganar en la geografía social y política de la provincia.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS)
-Las tendencias del movimiento. Vale valorar en sus detalles los componentes que se asociaron para dar el triunfo a la lista encabezada por César Baudino. Ha resultado francamente ostensible que a medida que quedaba atrás el gobierno radical de Sergio Montiel, un núcleo duro de la militancia docente fue alimentado un marco fundamentalmente confrontativo a la lucha. Esta tendencia resulta paradójica si se toma en cuenta que ya con el gobierno justicialista de Jorge Busti tuvo comienzos una progresiva recuperación del salario. Incluso, este mejoramiento del salario docente tuvo su correspondencia con el blanqueo de los diferentes códigos. A la fecha, salvo el incentivo docente, que viene de la Nación, todos los otros códigos de sueldos están sujetos a los aportes para jubilación. Sin embargo, a pesar de esta situación, en el curso de estos años la lucha docente se ha caracterizado por su intransigencia. Sin ir más lejos, el año pasado AGMER llevó adelante 20 días de paro, un registro que supera todas las marcas nacionales. Concretamente, en Capital Federal los docentes acumularon 15 días de paro, teniendo en cuenta que 10 de ellos tuvieron lugar en los últimos dos meses, cuando el gobierno de Mauricio Macri prácticamente cerró toda vía de negociación.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS)
-Una nueva experiencia y su tradición. Naturalmente surge como importante entrar a dar cuenta de este nuevo protagonismo en un gremio como AGMER. En ese sentido, es importante discernir que si bien tras las banderas de la Rojo y Negro se integraron varias tendencias, sobresalió como aglutinante el Movimiento Socialista de los Trabajadores, lo que constituye una verdadera novedad para la tradición política de esta provincia. La docente Silvia Venero, secretaria adjunta del gremio docente de Neuquén y que fuera candidata a gobernadora en esa provincia por el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), bajó a Concordia en apoyo a la Lista Rojo y Negro en las elecciones de febrero pasado.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS)
-Virajes y explicaciones. Hace aproximadamente dos años que César Baudino sostenía, en un reportaje de ANALISIS, que las paritarias docentes constituían una trampa cuyo propósito de fondo no era otro que dilatar los conflictos y dispersarlos sin dar respuesta a los reclamos de los trabajadores. A fin del año pasado los congresales de la Rojo y Negro, con el aporte de la Celeste Compromiso, impulsaron el retiro del AGMER de la mesa de paritarias con el gobierno provincial, en razón de los argumentos que supo desarrollar Baudino en el reportaje de referencia. La posición adoptada por AGMER abrió las puertas a la judicialización del conflicto, que terminó cerrando en el momento que el gobernador Urribarri decidía descontar los días de paro. Más allá de estos detalles y de esas circunstancias en la vida de AGMER, es importante destacar que el rechazo a las paritarias docentes por parte de la Rojo y Negro y su referente el secretario general, César Baudino, es de larga data.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS)
-Catamarca. Ha sido la primera elección del año con el condimento de que Eduardo Brizuela del Moral era uno de los pocos gobernadores que, constituyendo el elenco de los radicales K, saltó el cerco y se solidarizó activamente con las patronales del campo en la derogación de la Resolución 125 y el respaldo a la decisión de Julio César Cleto Cobos. Como se puede ver, todo un conjunto de posiciones, cada una de ellas más irritante para la piel del kirchnerismo nacional. Como era de esperar, el presidente del Consejo Justicialista aceptó el convite. Cabe decir que a Néstor Kirchner no le quedaba otra que dar batalla por adversos que se presentaran los resultados previos. El no fijar posiciones le marcaba una debilidad difícil de remontar cuando en octubre sobreviene nuevamente una confrontación electoral que para el kirchnerismo es fundamental.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS)
