“La cocina es sacrificada y compleja”

Edición: 
1089
Reportaje impertinente a Quique Molina, chef

Claudia Martínez
(Especial para ANÁLISIS)

Es muy humilde y sencillo. Trabaja en un restaurante de nombre francés: la Fourchette y fue quien diseño su menú y le dio su plato emblema.

Quique Molina en poco tiempo se ganó su lugar en la gastronomía local y se transformó en un referente de la cocina. Hoy reparte su tiempo en dos lugares, y enseña en la Escuela de Pastelería del Sindicato de Pasteleros.

Enrique Manuel Molina tiene los nombres de sus abuelos. Acusa 46 años y nació el 24 de agosto “el día de los vientos locos, el mismo día que Olmedo y Borges”, acota.

Nacido en Paraná, es maestro pastelero, docente, cocinero, y muy competitivo con su trabajo. Estudió en la antigua escuela de la Asociación Hotelera Gastronómica, la de la Federación hotelera.

“Cuando yo estudié había tres escuelas. Una era en Buenos Aires, otra en Mar del Plata y otra en Bariloche. Me fui. Conseguí una beca y pude ir a estudiar a Mar del Plata. Tenía 21 años. Era la Escuela de Hotelería y Gastronomía”, afirma mientras toma unos mates en la cocina de su casa, a la vuelta de un sacrificado día de trabajo.

Ahí la conoció a Angelina Ciancaglini, su esposa, su amiga, su novia. La que esté con él siempre y la mamá de sus dos hijos: Santi y Lucía.

Las escuelas de cocina se han transformado en los últimos años como en una suerte de plataforma al estrellato de muchos, pero no es tan simple la cosa a criterio de Angelina y Quique. Ahora te recibís de chef; antes en el primer año te recibías de commis, en el segundo año eras ayudante y en el tercero era cocina internacional. Pasa que nada que ver con lo que es ahora. Antes eran aplicaciones de la base de la cocina todos los días. Todos los días clases. Era como una secundaria pero de gastronomía. Cinco días a la semana y varias horas de clase por día. Era una escuela hotel, dentro del hotel funcionaba y los que éramos becados hacíamos la practica ahí”, recuerda.

Ahí hizo de mozo, de cadete, de recepcionista, de telefonista, y así aprendió.
—¿Después de eso qué paso?
—Luego de ahí trabajé en varios lados, pasantías en restaurantes y después me mandaron a una pastelería donde estuve 5 años. Hice pasantías en el Sheraton y de ahí a Bariloche, donde estuve 3 años y medio. Y eso fue de un día para el otro. Me llamaron y me fui, mi hija era chica. Tomé el cole y me fui. De loco que era. Al segundo día por el cambio de clima me enfermé y me pregunté “¿qué hice?” (se ríe).

(Más información en la edición gráfica número 1089 de la revista ANALISIS del jueves 8 de noviembre de 2018)

Deportes

Malvinas sacó ventaja en el encuentro de ida de las semifinales.

San Benito ganó sus dos primeros partidos y lidera la Liga Femenina.

El "Pingüino" venció a Oro Verde en el clásico y marcha segundo en la tabla.

Defensores de Pronunciamiento ganó por 3-1 jugando como local.

El "Fortín" celebró la clasificación a la final en los vestuarios.

Werner se quedó con la victoria y ahora lidera el campeonato.

Ochoa se quedó con la cuarta final de la temporada en el TC Pista.

En el duelo por la fase regular acabaron empatados 0-0.

Opinión

Por Selva Almada (*)
Por José Federico Mastaglia (*)  

(Foto ilustrativa: Cedoc)

Cultura

Un espacio de salud mental pensado para adolescentes y jóvenes.

El beneficio es en el marco de plan federal FortalecER Teatro.

La actividad se realizará el próximo lunes en la FCEDU.