Ricardo Ilardo vive en Riccione, Italia y desde el 2001 dejó Argentina. Ricardo Saín lleva más de 15 años viviendo en Miami. Pero, antes vivió otros tantos en El Salvador. Los dos son de Paraná. Los dos están vinculados al trabajo periodístico o estuvieron. ANÁLISIS dialogó con ellos y dan su visión de una Argentina que afrontó una de las elecciones más polarizadas de la historia. Cómo es vivir con los ojos puestos en su ciudad, qué esperan de la Argentina y cuáles son sus deseos para su país.

Por Claudia Martínez

Ricardo Ilardo hace bastante dejó calle 3 de Febrero de la capital provincial para cumplir sus sueños. Algo que le costó años, lágrimas y horas de viaje. Ricardo era fotógrafo de Prensa Municipal de Paraná y en su momento fue Embajador Quilmes. Así y todo, ganó un concurso y volvió al país después de 10 años.

Hoy vive en Italia, en Riccione, a metros del Mediterráneo, en un lugar soñado, donde parece que el mejor pintor dejó sus colores. Con su pareja planifican cada lugar que recorren y lo documentan con sus videos, tanto en italiano como en español.

Ricardo ahora puede ir y volver cada tanto, recorre el barrio que lo vió crecer, los amigos que lo adoran, y las calles de Paraná, que lo tuvieron como el más risueño de todos.

“Lo que pude ver en la Argentina es que tiene mucha expectativa de lo que va a pasar. Las opiniones estaban divididas, lo que es común, pero lo que veo en todos son las ganas, la necesidad de que las cosas mejoren. El italiano no está enterado de las cosas que pasan en Argentina, en general no comentan las cosas. Pero, en general lo que comentan es lo que ocurrió en el 2001, porque quedaron muchos italianos afectados que habían participado económicamente o quedaron mal”, dice en medio de un alto en su trabajo.

La charla se hizo tarde, cuando Ricardo descansó en su trabajo como recepcionista de un hotel soñado en su ciudad.

- ¿Cuándo viniste ahora, como viste la actitud de la gente?

-La gente no está tranquila y en general muchos tienen miedo de lo que va a pasar. Porque antes tenían dificultad para llegar a fin de mes, ahora con la devaluación se complica. Yo lo viví con una visión muy parcial. Pero, hablando de costos -por ejemplo- para comer, te cuento que salí a comer allá en Paraná y pagué yo la cena para 7 personas y lo que me costó es lo que pago por una cena en Italia. Es un infierno la diferencia. Cuando dejé el país estaba uno a uno, ahora entrar al país con un euro a 1.000 pesos es absurdo. No sécómo llegamos a esto. No sécómo hacen para vivir. Mucha gente me cuenta que se recortan gustos que se daban. Viajes u otra cosa. Entré a un supermercado y me encontré con las góndolas vacías. Y eso me llamó la atención. Y la gente está habituada. Muchos viven cierta resignación. Por ejemplo, los baches en la calle. Me preguntaba porqué no los arreglaban. Todos dicen “es así”. Un amigo mío ante mi planteo me decía “vos no lo entenderías”. A lo mejor el hecho de estar mucho tiempo afuera del país, pero, sinceramente hay muchas cosas que no entiendo: la actitud de los políticos, de los que tienen una responsabilidad o un cargo, los que tienen la posibilidad de cambiarle la vida la gente…Vi mucho miedo en la calle. Tengo amigos que viven en Buenos Aires y me dicen que se sacan todo lo que pueda tener valoral salir a la calle. Eso vi mucho.

- ¿Qué has escuchado de Javier Milei?

-Con esta cosa de ser de ultraderecha, muchos lo ven del grupo de Meloni de Italia o de Trump en Estados Unidos. Esa es la impresión que tienen de él, que es demasiado diferente. Lo que vemos desde aquí es que para cambiar algo que hace mucho tiempo está, que hiciste algo que siempre te dio el mismo resultado, hay que hacer algo distinto. Obviamente que hay muchas cosas de Milei que no agradan, como cortaralgunos derechos socialeso cosas referidas ala integración. Pero, tengo la impresiónsé que es algo distinto, de que cambien las cosas. Tiempo atrás lo veía en la mesa de Mirtha (Legrand) y pensábamos que no iba a ganar y ganó. Lo mismo que se pensaba de Trump en Estados Unidos.Creo que Milei ganó gracias a la juventud que lo votó. Esa juventud quiere algo nuevo y no tiene el prejuicio o miedo de elegir algo nuevo.

- ¿Cómo paranaense cómo viste la ciudad?

-Con menos baches que la vez pasada (se ríe). La vi más linda en la parte de parque, la peatonal, de las plazas, vi una fuente al ras del piso -que vi frente al Instituto del Seguro- que es algo que se ve en muchas plazas del mundo. El trato del paranaense, siempre bien. También escuché críticas. Me gustó. Yo siempre me siento en casa, cada vez entiendo menos porqué me cambian de sentido las calles, negocios que ya no están, la ciudad está enorme, extendido por todos lados. Mucha gente joven de taxistas, ellos me contaban que votaron para cambiar un poco las fichas del tablero que eran siempre las mismas.

(Más información en la edición gráfica de la revista ANALISIS, edición 1147, del día 20 de diciembre de 2023)