Marcelo Comas

Imposibilitado de participar de un torneo nacional sin el apoyo necesario para afrontar los gastos que va generando la competencia, Atlético Paraná tuvo que recurrir a la ayuda económica y futbolística de Universitario de Villa Libertador San Martín: primero jugando el Torneo del Interior, donde tuvo excelentes resultados y llegó a semifinales, y ahora con la posibilidad de intervenir en la cuarta categoría del fútbol argentino, otra vez de la mano del Petrolero, incursión que le ha dado buenos frutos tanto institucional como deportivamente. Al parecer, los mismos pasos seguiría Sportivo Urquiza a fin de tomar parte de la edición 2006 del Torneo del Interior.

La noticia tomó cuerpo el fin de semana en los pasillos de la entidad de La Floresta. Sus dirigentes anunciaron que no sería descabellado pensar en una alianza entre la V Azulada y Belgrano. La chance de jugar el certamen nacional quedó en manos de Sportivo Urquiza al ser invitado Atlético Paraná -campeón del Clausura 2004- para el Argentino B.

Si la propuesta toma color, El Mondonguero se haría cargo de todos los gastos que genere la incursión en dicha competencia, incluir en el proyecto a futbolistas de Sportivo y hacer las veces de local en el estadio de La Floresta.

Plan frustrado

La misma especie salió a flote en mayo de este año, pero otros eran los protagonistas. Si bien se trataba sólo de un trascendido, la información daba cuenta de que Ministerio y Belgrano pretendían aunar fuerzas para participar del Torneo del Interior de 2006. Es que gracias a un acercamiento entre dirigentes de ambas entidades se intentaba concretar un acuerdo que finalmente no tuvo el desenlace esperado.

En concreto, la participación de “Los del Puerto” en la quinta categoría del fútbol argentino se producirá recién en 2006, por lo que el tiempo para trabajar en ese sentido es prolongado. El encargado de dar el primer paso a fin de acercar las partes fue Walter Rolandelli, presidente albiceleste.

En tanto, desde el riñón del club de calle Salta y Nogoyá surgió el nombre de Oscar Chapino -titular de la Federación Entrerriana de Fútbol- para que se encargue de concertar el primer encuentro con la gente del Verde. La misión no era difícil ya que Chapino es amigo personal de Juan Carlos Mosqueda, que ocupa la primera magistratura en el club instalado en el acceso a la capital provincial.

El plan a llevar a cabo consistía en conformar un equipo con jugadores de ambos planteles. Además, se resolvería en dicho encuentro la modalidad para generar recursos y de qué manera se repartirían los gastos.

(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)