Marcelo Comas

Con el fin de prevenir enfermedades cardíacas y afecciones en los deportistas entrerrianos se instalaron en la provincia 20 salas médicas. Cerca de asemejarse a una organización óptima, los dirigentes de la Dirección de Deportes se han empapado en profundidad de la realidad de estos centros. En Paraná funciona una sala al lado del Círculo Médico bajo la denominación de la Sala de Prevención y Evaluación de la Aptitud Física Inicial del Deportista. La coordinación está cargo del cardiólogo Néstor Lódolo, referente en este tipo de emprendimientos y coordinador de los centros repartidos en todo el mapa provincial. En diálogo con este semanario, el profesional indicó que el principal problema que se presenta es la falta de conciencia de los deportistas a la hora de realizar un control exhaustivo. Citó, por dar un ejemplo, los casos del seguimiento que se efectúa en los planteles de Echagüe, Sionista y Patronato, tres instituciones dedicadas al alto rendimiento.

En el marco del deporte la salud juega un rol preponderante. No sólo es fundamental para el alto rendimiento, donde los deportistas son expuestos a complejos análisis que pueden detectar cualquier tipo de afección. La cuestión radica en prevenir enfermedades en los chicos que recién se inician en la actividad, como así también en los que ya llevan algunos años practicando algún deporte y no cuentan con los recursos suficientes para este tipo de exámenes. Todo sirve para que alguna triste sorpresa no se entrometa en el camino del deportista y termine en una fatalidad.

Sobre la realidad de la prevención médica para deportistas y cómo se está trabajando en la materia, ANALISIS mantuvo una extensa entrevista con el cardiólogo y profesor de Educación Física, Néstor Lódolo, responsable del programa SPEAFD (Sala de Prevención y Evaluación de la Aptitud Física Inicial del Deportista), que depende del Ministerio de Salud y Acción Social en conjunto con la Subsecretaría de Deportes y Turismo Social de la provincia.

-¿Cómo se está trabajando con relación a la medicina del deporte en la provincia?
-Entre Ríos hace ya 14 años que tiene una política de desarrollo del examen médico deportivo, de pretemporada o pre-participativa muy importante. Desde 1992 se encuentra en marcha un programa provincial en el cual todas las federaciones tienen disponibles consultorios médicos municipales, con el aporte de la Subsecretaría de Deportes de la provincia, que funcionan en distintos puntos de la provincia. En este momento contamos con 20 centros de atención sanitaria; fueron 10, luego 14, volvieron a ser 10, y hoy son 20 los que tienen el apoyo de la Subsecretaría y 20 los municipios que adhieren a este programa de desarrollo de la medicina del deporte.

-¿Qué se está haciendo?
-Normalmente el examen médico del deportista tiene tres momentos: la pretemporada, la temporada y la postemporada. En la pretemporada se realiza la determinación del riesgo de muerte súbita, se califica cómo vive el deportista, evaluamos qué lesiones han tenido y a continuación se programa el año. Durante la temporada se procura evitar las lesiones, haciendo un contenedor de la dieta y analizando si existe o no fatiga. Al final de la temporada se realiza una evaluación de cómo fue el año, de cómo terminó, de cuánto creció, cuánto desarrolló, cuánto mejoró el deportista en cuestión. Ésas son las tres etapas. En la actualidad, lo más importante es lo que estamos llevando a cabo durante el período pre-participativo. En la provincia se trabaja óptimamente en el área medicinal del deporte. Los clubes como Patronato, Sionista y Echagüe tienen un seguimiento muy importante en el transcurso de la competencia.

-En este caso se refiriere a la práctica deportiva en el orden profesional…
-Sí, estamos hablando del alto rendimiento. No obstante, hay cada vez más adhesión de las federaciones y de los padres de los jóvenes deportistas, que en su mayoría son infanto-juveniles, a realizar un seguimiento en el deportista. Anualmente se realizan su examen cardiovascular, sus ergometrías, sus análisis, el pediatra está interesado por las actividades deportivas del joven, el médico clínico también se preocupa por la actividad de su paciente. El médico del deporte trabaja en forma interrelacionada con el médico de cabecera del joven, porque no deja de tener importancia el estado de salud del deportista y no deja de tener la relación con el profesional que maneja esa familia. Nosotros enfatizamos mucho en lo que respecta al deporte infanto-juvenil, dado que es mayoría en Entre Ríos, y en el maxi-deporte o deporte senior es muy importante conocer cómo duermen, cómo se alimentan y qué bebidas toman. Entonces, más allá de una revisación médica a los 10 años, teniendo en cuenta cuánto pueda llegar a pesar o medir, es primordial que el niño esté acompañado del padre para poder conversar todos estos aspectos.

(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)