Pablo Rochi

En los últimos tiempos, las diferencias de criterio y conducción se hicieron notar, en algunos casos con mayor repercusión. Lo que nunca nadie se imaginó es que esos desacuerdos y discrepancias se iban a transformar en severas acusaciones, graves denuncias y una ruptura aguda y casi insalvable entre dirigentes de ambas entidades. La Federación de Básquet de Entre Ríos (Feber) y la Asociación Paranaense de este deporte (APB) hace tiempo que rompieron relaciones y si bien ahora buscan maquillar acuerdos, la intriga es saber si hay vendajes para heridas tan profundas.

Desde junio de 2016 a la fecha, flechazos de todo tipo fueron y vinieron en una pelea que incluyó cartas documento, presentaciones en Personería Jurídica, denuncias en el Inadi y entrevistas con acusaciones entre directivos.

La APB denunció a la Mesa Directiva de la Feber por un manejo turbio de las arcas de la Federación, entre otras acusaciones que también se vinculan a lo dirigencial y deportivo. Del otro lado, las devoluciones no se hicieron esperar y del mismo modo criticaron sin anestesia a sus pares de Paraná.

La brecha entre ambas instituciones es tan grande que la Confederación Argentina de Básquetbol debió interceder con la idea de controlar el incendio. Sin levantar demasiada polvareda, desde la CABB se convocó a directivos de las dos instituciones a fin de poner las diferencias sobre la mesa e ir en busca de un acuerdo.

La reunión fue la semana pasada en Buenos Aires, en la sede misma de la Confederación. ¿Resultado de la audiencia? En algunos puntos hubo un acercamiento y en otros no. Desde ya, fue una reunión muy caliente, de fuertes cuestionamientos y tonos elevados. Duró seis horas y, al parecer, aún hay puntos por resolver. Por ese motivo habrá un nuevo cónclave, que se fijó para el 1 de junio.

La APB envió como representantes a Julio Galuccio y al reconocido Orlando Chungo Butta, hombre fuerte del básquet nacional. La Feber contó con la presencia de su presidente, Carlos Álvarez, y su vicepresidente, Julio Giménez.

La cita tuvo un breve aporte de Federico Susbielles, presidente de la CABB. Después, dos abogados de la entidad madre buscaron que la balanza entre las partes sea equilibrada o se vuelque del lado de la razón. No fue nada fácil, tal es así que la historia tendrá un nuevo capítulo.

(Más información en la edición gráfica número 1059 de la revista ANALISIS del miércoles 24 de mayo de 2017)