L.D
Según datos recabados por el Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper) aumentó un 67,4 por ciento el número de afiliados que padece algún tipo de cáncer entre 2005 y 2016. Puntualmente, en 2016 se registraron 1.677 pacientes, mientras que en 2010 eran 1.193 y en 2005, 1.002.
Si bien a primera vista los números alarman, no están fuera del rango de la tasa de aumento calculada para el decenio por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que marcó un 70 por ciento de incremento de la incidencia de tumores a nivel global. Entre Ríos, al menos en el estudio que observó al universo de los afiliados al Iosper, está tres puntos por debajo.
Contrariamente a lo que a veces se piensa, “los distintos tipos de cáncer crecen más en los países más desarrollados, donde la dieta es más insana”, explicó a ANÁLISIS Oscar Remedi, experto en la materia, hasta hace semanas director del Instituto Provincial del Cáncer e impulsor de la ley de descentralización hospitalaria en la provincia, entre otros antecedentes.
Cifras por departamento
El aumento de la patología presenta numerosas aristas, entre las que sobresalen los distintos tipos de cáncer y las variaciones según las diferentes zonas del territorio provincial.
Gualeguaychú es, por lejos, el departamento en el que se registró una mayor suba de casos entre los afiliados a la obra social: crecieron bastante más del doble en la última década. Puntualmente, se pasó de 59 casos en 2005 a 109 en 2010 y el año pasado se llegó a 144 casos.
La proporción asusta: supera el 144 por ciento, es decir que duplica la media provincial. Y es ineludible el dato del emplazamiento y puesta en funcionamiento de la pastera en la localidad de Fray Bentos, sobre el río Uruguay, frente a la ciudad de Gualeguaychú. Fue inaugurada en 2007 bajo la denominación Botnia y dos años más tarde se vendió a la finlandesa UPM. Volviendo a los datos de la OMS, en Gualeguaychú el índice se duplica.
En Paraná, se pasó de 441 casos en 2005, a 518 en 2010 y a 688 el año pasado. La suba entre 2001 y 2016 es menor a la de la media provincial, ya que llega al orden del 56 por ciento. Aunque en este tipo de temas no hay cifras alentadoras, es posible sostener que, al menos de acuerdo a los datos del Iosper, se está bastante por debajo de la media global.
En Concordia, en tanto, con 90 casos en 2005, 119 en 2010 y 168 en 2016, el incremento, en proporción, es bastante superior: un 86 por ciento. En Concepción del Uruguay las cifras dieron un salto llamativo: después de bajar de 47 a 41 los afiliados al Iosper enfermos de cáncer entre 2005 y 2010, se pasó a 87 casos en 2016. El aumento registrado es del 85 por ciento.
Las cifras se mantienen en todos los departamentos de la provincia, con algunas particularidades. En Nogoyá, tras registrarse casi la misma cantidad entre 2005 y 2010, años en los que se contabilizaron 36 y 35 casos respectivamente, las cifras también dieron un salto y se llegó, en 2016, a 66 casos.
(Más información en la edición gráfica número 1063 de la revista ANALISIS del jueves 27 de julio de 2017)
