El cambio de signo político en la Casa Gris dejará a varios hombres y mujeres del peronismo sin cargo público después de muchos años a partir del 10 de diciembre. La rosca de los reacomodamientos comenzó silenciosamente, en medio de un clima de pases de factura internos propios de la derrota. Una eventual llegada de Sergio Massa a la Presidencia de la Nación agita esperanzas de algunos puestos a nivel nacional y Guillermo Michel se presenta como la llave para acceder. Buscan su destino apellidos de peso como Bahl, Solanas, Piaggio, Giano, Treppo, Erro, Navarro,Rebord,Darrichón y Casaretto,entre muchos otros.
“Para un peronista hay algo peor que la traición: el llano”. La frase es adjudicada al legendario dirigente justicialista ya fallecido Juan Carlos “Chueco” Mazzón. Refiere a ese no lugar al que llega el político que perdió el poder y, junto con él, el cargo, el despacho, el auto y el presupuesto.
Hacia allí se encaminan después de muchos años numerosos hombres y mujeres de la política entrerriana a los que la victoria de Rogelio Frigerio los deja frente a frente con el tanguero sentimiento del dolor de ya no ser.
Están los candidatos derrotados. Los que quedaron fuera de las listas de diputados y senadores. Los que estaban en la boleta, pero no entraron. Los que fueron por las intendencias de sus ciudades y perdieron. Los que apostaron al proyecto político liderado por alguna figura a la que el voto le fue esquivo…
Algunos quedaron mejor parados que otros. Hay quienes tienen edad y ganas como para seguir en carrera y otros no tanto. Y no todos tienen espíritu militante como para hacer política desde el llano.
¿Volver a la actividad privada? ¿Retirarse? ¿Pugnar por alguna asesoría legislativa o municipal? ¿Apostar a la victoria de Sergio Massa y buscar algo nacional? Los lugares son pocos y los desempleados, al menos en los papeles, el 10 de diciembre serán muchos.
El despacho de Gustavo Bordet en la Cámara de Diputados de la Nación, el bloque mayoritario en el Senado provincial, un puñado de municipios, las oficinas de los futuros legisladores y hasta la banca en el Parlasur a la que accedió José Cáceres usualmente serían puestos menores y poco interesantes. Hoy, aparecen como posibles refugios en los que encontrar contención y algunas herramientas para segur haciendo política.
En las horas posteriores a los resultados, hubo algunas pistas sobre los pasos a seguir, pero el destino para muchos es incierto. La nueva realidad para el peronismo fuera del poder en la provincia -que hoy habla más de transición ordenada que de oposición- es un proceso arduo que recién comienza.
La fórmula que no fue
Los primeros nombres para mencionar son los de quienes integraron la fórmula que compitió por la Gobernación. Adán Bahl, al término de su gestión como intendente, no tendrá cargo político por primera vez desde 2004, cuando fue designado en la Secretaría de Obras Públicas.
Desde entonces, fue titular de esa repartición, ministro de Gobierno y Justicia, vicegobernador entre 2015 y 2019 e intendente de Paraná desde 2019 hasta el 10 de diciembre de este año.
En las declaraciones que formuló en estas horas algo dejó entreversobre su futuro: dijo que se pondría a disposición de los intendentes para ayudarlos “ejerciendo eventualmente una oposición constructiva”.¿Una victoria de Sergio Massa en el balotaje lo pone en carrera para algún cargo nacional? Habrá que ver.
(Más información en la edición gráfica de la revista ANALISIS, edición 1145, del día 26 de octubre de 2023)
