En el cierre de un fin de semana perfecto, Tomás de Rocamora de Concepción del Uruguay le ganó 67-63 a Unión Florida en tiempo en suplementario y festejó por la Liga Nacional Femenina de Básquet. Carla Miculka fue la figura del partido con un doble doble de 18 puntos y 16 rebotes, seguida por Delfina Saravia con 16 unidades. En las Rojas, Aldana Piñeiro terminó como goleadora con 20 puntos.

Rocamora se llevó un entretenido primer cuarto 17-12 donde dos triples de Martina Schunk fueron valiosos, primero para pasar al frente y luego para igualar el trámite (10-10). Unión Florida tuvo a Delfina Saravia como una de sus jugadoras más efectivas con cinco puntos pero no encontró goles en las manos de Carla Miculka que apenas logró dos libres. Renata Pidone se encargó de cerrar los primeros 10 minutos con las de Lali González dejando una mejor impresión.

Un parcial 6-0 a favor de Unión Florida dio vuelta las cosas en el arranque del segundo tramo (17-18). Después de un tiempo muerto dos triples seguidos de Aldana Piñeiro dejaron a las Rojas otra vez arriba (23-18) aunque en lo sucesivo la visita mejoró sus ofensivas y lastimó con Martínez, Baccarelli y Saravia. A Rocamora le costaron más los ataques a tal punto que las únicas que sumaron fueron Piñeiro y Santini. Unión Florida llegó a despegarse por seis puntos pero finalmente se marcharon 31-33 al descanso largo.

La paridad que se había dado en el primer tiempo empezó a romperse en el tercer parcial porque la defensa zonal de Unión Florida secó de goles a Rocamora. Una gran faena de Milculka en los dos tableros, los puntos de Saravia y Baccarelli ayudaron a que la visita se despegue en el marcador y quede 38-50 arriba de cara al último cuarto.

Rocamora recuperó el protagonismo en el cuarto decisivo, triple de Santini para arrancar y una Piñeiro cada vez más efectiva para ir achicando la diferencia. Unión Florida quedó muy condicionado a todo lo que pudo hacer Miculka en la pintura. Ailén Ayala fue otra que más adelante se calzó el equipo al hombro junto con Figueroa para retomar el dominio cerca del final (62-61). El partido quedó igualado tras un libre de Miculka y después ambos equipos dejaron pasar su chance de cerrarlo y hubo suplementario (62-62).

En el alargue los nervios y el cansancio también jugaron su papel. A los dos les costó convertir incluso cuando fueron a la línea de libres, desde donde únicamente llegaron goles. Además, las locales hicieron todo lo posible para cerrarle los caminos a Miculka. En ese contexto fue Rocamora el que estuvo un poco más preciso y se terminó quedando con un valioso triunfo.