El Tribunal Oral Federal número 1 decidió este viernes sobreseer a todos los procesados en la causa denominada Qunita, que investigaba un presunto fraude al Estado en 2015 en la entrega de 150.000 kits a embarazadas.

Entre los funcionarios que fueron desvinculados de la causa están el actual ministro de Salud bonaerense Daniel Gollán, su segundo Nicolás Kreplak y el ex jefe de Gabinete de la Nación, Aníbal Fernández.

La decisión la tomaron de manera unánime los jueces Adrián Grünberg, José Antonio Michilini y Ricardo Basílico, luego del pedido que había realizado la fiscal Gabriela Baigún, quien había considerado que no se había logrado probar la existencia de delito, ni por fraude a la administración pública, ni por el direccionamieto de la licitación.

Baigún es una de las funcionarias judiciales que en su momento firmó la solicitada con la que se creó la agrupación Justicia Legítima, afín al kirchnerismo. Grünberg, en tanto, es el magistrado que pidió el cierre de la causa dólar futuro, en la que se investigó a la ex presidenta Cristina Kirchner y otros ex funcionarios de su gobierno.

Los alcanzados por la medida fueron, además de Fernández, Kreplak y Gollán, Oscar Michelli, Gustavo Cilia, Jorge Artazcoz, Dora Ruocco, Leandro Flores, Alicia Escobar Atensio, Fanny Clemente Lamas, Carlos Tejada, Claudia Estevab, Juan Piccolini, Ana Paula Herrera Viana, Martín Miranda, Sergio Lupi, Diego Romero y María Victoria Flores.

Grünberg avaló el sobreseimiento que había solicitado Baigún y citó como precedente el fallo de dólar futuro. El juez consideró que "corresponde hacer lugar al planteo de las partes incidentistas, que ha recibido acogida favorable por parte de la Sra. Representante del Ministerio Público Fiscal; y, en consecuencia, deberá disponerse el sobreseimiento de la totalidad de los imputados en las presentes actuaciones".

Basílico, otro de los camaristas que votó, sostuvo: "El dictamen de la Dra. Gabriela Baigún se encuentra suficientemente fundado y resulta coherente al exponer los motivos que la condujeron a desistir de la acusación".

Michilini también adhirió a sua colegas y entre los tres, en el fallo final, dispusieron el levantamiento de las medidas cautelares de naturaleza patrimonial decretadas, así como dejaron sentado que "el presente proceso no afecta el buen nombre y honor del que hubiesen gozado las personas mencionadas".

La causa del Plan Qunita la instruyó en el 2016 el fallecido juez federal Claudio Bonadio, quien en su momento procesó al ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández y al ex ministro de Salud nacional y actual titular de esa cartera en la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollan, entre otros.

La acusación surgió luego de que se conociera una licitación de compras de 150.000 kits con un supuesto sobreprecio de alrededor de $ 3000 por cada uno, lo que arrojaba un perjuicio para el Estado de, cuanto menos, “cuatrocientos cincuenta millones de pesos”, según la denuncia del fiscal de instrucción, Eduardo Taiano. La compra se hizo durante la segunda presidencia de Cristina Kirchner.

Cristina festejó en julio de 2015 que su gobierno "pagó 7.784 pesos por cada kit del plan Qunita para embarazadas de escasos recursos y que el precio de Mercado era de "11.550 pesos". Sin embargo, la diputada Graciela Ocaña denunció luego que compró el mismo equipo en negocios minoristas de Once y le costó -con productos de mejor calidad- 4.129 pesos.