A primera hora de la mañana del miércoles, la planta de Echeverría y los centros distribuidores estaban a un 50%, mientras que la planta de avenida Ramírez ya se encontraba al total de reservas. La Municipalidad asiste mediante camiones cisternas con agua potable a los barrios más afectados.

A raíz del desperfecto eléctrico, sucedido en uno de los bobinados del estator del motor durante la madrugada del domingo, los niveles de producción, reservas y distribución se vieron gravemente afectados por la detención de la producción y aun se trabaja para normalizarlos.

Ese mismo día, luego de que ENERSA lograra restablecer el suministro eléctrico, se pasó a realizar pruebas individuales de cada componente lográndose poner en funcionamiento paulatinamente las electrobombas que habían cesado su operatividad. Todo este proceso fue un arduo trabajo de dos jornadas completas sin interrupción. En el transcurso de este martes se pudo recuperar el motor de la bomba en el cual se dio el desperfecto.

Esta falla, del tipo homopolar a tierra, provocó un desbalance de tensión entre fases provocando la actuación de los protectores por sobretensión en el interruptor principal. Se trata de un evento sumamente extraordinario que obligó a cesar la producción de agua, situación anómala que no tiene demasiados antecedentes en la historia.